Es la llave que permitía abrir la puerta de Orthanc, el único punto por el cual se podía acceder a la torre inexpugnable. Durante gran parte de la Tercera Edad, mientras el territorio de Calenardhon perteneció a Gondor, la llave fue custodiada por el jefe del destacamento de Isengard.
En 2510 se produce el Juramento de Eorl (a través del cual el Senescal Cirion otorgó el Calenardhon al pueblo de Eorl), que estipulaba el cierre de Orthanc. Las llaves se llevaron a Minas Tirith para su salvaguarda. Sin embargo, el círculo de Isengard fue una plaza fuerte donde se acantonaron sucesivamente hombres de Gondor, de Rohan y finalmente, Dunlendinos. Para evitar futuras ocupaciones, el Senescal Beren, en 2759, cedió la llave de Orthanc ni más ni menos que a Saruman, que pasó a habitar la Torre.
Posteriormente, durante la Guerra del Anillo las fuerzas del traidor Saruman fueron aniquiladas, y el Círculo de Piedra de Isengard destruido por los Ents. Saruman quedó confinado en Orthanc, hasta que Bárbol se convenció de que ya no podía hacer ningún mal: le dejó salir obligándolo antes a entregarle las llaves de la Torre, y una semana más tarde los Ents las devolverían a su legítimo dueño, el Rey Elessar.